Me presento: soy Martín, tengo 42 años, estoy casado con Ana Clara desde 1998. Tenemos cuatro hijos: Joaquín, Malena, Tomás y Mauricio. Soy ingeniero agrónomo y administro dos empresas agropecuarias en el departamento de Florida.
Siendo estudiante de agronomía me invitaron a participar en una jornada de un grupo de productores lecheros en San José. Me pareció buenísima la modalidad de trabajo, ver a todos los diferentes productores enfocados todo un día en cómo poder aportar a la mejora del sistema que estábamos analizando.
Ni bien me recibí nos radicamos en el campo, donde vivimos durante diez años. De arranque no tenía muy claro qué sistema quería armar, pero sí tenía claro que ser integrante de un grupo de productores era una herramienta increíble de la que quería ser parte. Así empecé a llamar a productores de la zona, a muchos sin conocerlos, y fuimos entusiasmándonos hasta que en el año 2000 arrancó nuestro grupo: “La Gran Siete”.
Hoy somos doce empresas las integrantes, ocho lo son desde el arranque del grupo. Somos empresarios ganaderos todos con vacunos y algunos también con ovinos; hay empresas con agricultura propia o de terceros; hay también algunos con sistemas silvopastoriles. Dentro de la ganadería, unos con mucha pastura sembrada, y otros con mucho campo natural. Hay dueños de campo y hay arrendatarios. El espectro es muy amplio, y entre otras cosas esto hace a la riqueza del grupo.
Qué me aporta el grupo:
- La actividad de trabajar en el campo tiene la característica de que ayudar a mejorar a otros no va a perjudicar el desempeño de mi empresa, cosa que no se da en muchas otras actividades.
- Analizando sistemas de producción, vemos tecnologías, manejos que hace cada productor que se pueden transferir a nuestro sistema o adaptarlos para él.
- Nos ayuda a definir bien qué es lo que queremos en nuestra empresa y cómo buscar ese objetivo.
- Después de la gira donde se muestra lo que hacemos hay un retorno de los productores, que con críticas constructivas nos pueden mostrar cómo hacer mejor algunas cosas (con la rutina a veces no nos percatamos de ello).
- Nos obliga a llevar registros físicos de producción con los que llegamos a resultados económicos de la actividad que estamos realizando. Todo esto con criterios estandarizados, que nos permiten compararnos con otras empresas, así como ver qué es lo que hacen quienes logran los mejores resultados.
- Con el paso de los años también posibilita analizar la evolución de los indicadores y resultados de nuestra empresa.
- Nos ayuda a mantenernos informados y actualizados sobre la situación de mercados, nuevas tecnologías o jornadas.
- Tener un técnico asesor para preparar los informes y las reuniones termina siendo un apoyo muy importante para momentos en que hay que tomar decisiones importantes, ya que ellos conocen mucho a la empresa y al empresario.
- Acompañarnos y aconsejarnos en momentos duros de sequía, cuando apareció la aftosa o cuando se trancan mercados.
- Hemos realizado ensayos de distinta índole, buscando validar en nuestros sistemas tecnologías cuyos resultados no son suficientemente claros en informes de institutos de investigación nacional. Salir de nuestros predios a otras empresas y hacer giras en el exterior ayuda a crecer personal y profesionalmente.
- El grupo humano que se va formando con el tiempo, con tantas experiencias compartidas. La madre de un amigo cuando evalúa la reunión en su casa siempre destaca “lo cristiano” de este tipo de actividad, de entrega de todo un día para ayudar al otro. Lo mejor es que de esa entrega todos nos vamos fortalecidos, y en general de cada reunión salimos con nuevas ideas para nuestra empresa.
- Después de tantos años trabajando en grupo, cuando ya va pasando un año de la última reunión en casa, uno va sintiendo casi la necesidad de que venga el grupo para analizar a fondo todo lo que se está haciendo y repensar la empresa.
Creo que ser integrante de un grupo no es para todos los productores, pero sí para muchos más de los que hoy trabajamos así. Esta modalidad seguramente va a ser positiva para cada productor/familia/empresa y para todo el país, ya que la búsqueda última es que cuidando los recursos se pueda producir más y mejor.
Espero con esto lograr sembrar unas semillas para que algún productor se entusiasme en este camino. Vale la pena.
mARTÍN MUY BUENA LA NOTA! CREO QUE ES VALIOSO PARA QUIEN LEA ESTA NOTA, AGREGAR QUE EL GRUPO LA GRAN SIETE ES UN GRUPO CREA Y QUE ESTÁ MUY INTEGRADO A LA RED CREA QUE CONFORMAN EN FUCREA MÁS DE 600 FAMILIAS DEL AGRO. TODO AQUEL QUE SE VEA MOTIVADO POR ESTA EXCELENTE NOTA Y POR LA POSIBILIDAD DE MEJORAR LA COMPETITIVIDAD DE SUS EXPLOTACIONES NO DUDE EN PONERSE EN CONTACTO CON FUCREA A TRAVES DE http://WWW.FUCREA.ORG Y APROVECHO TAMBIÉN ESTE ESPACIO PARA AGRADECER AL GRUPO CREA LA GRAN SIETE POR ESTOS 15 AÑOS DE APORTE A FUCREA AL TIEMPO QUE FELICITARLOS Y ESTIMULARLOS A IR POR MÁS!
Me pareció brillante todo lo que dices. Muy claro, muy concreto. Muy útil.
Las actividades del grupo ayudan a crecer como empresario, como persona y como Familia. Que más se puede pedir?? Felicitaciones.
No soy del sector agropecuario, soy del sector industrial .
Daniel Cosentino