ForoRural entrevistó a Diego Echenique, ingeniero agrónomo que desde hace más de una década administra un establecimiento en la zona de Sarandí del Yí, para conversar sobre el particular manejo de las pasturas que realiza en su predio. A continuación se resume el contenido de la extensa charla con este referente.

Tipo de pasturas en el establecimiento de recría
En la zona de recría del establecimiento la relación de campo mejorado y praderas artificiales es 60-40, respectivamente. Los mejoramientos de campo se hacen en base a lotus rincón. En ciertas áreas se les agregaron tréboles (rojo y/o blanco) en cobertura. También con el aumento de la fertilidad aparece espontáneamente ryegrass y festuca.

Las praderas se hacen en base a festuca, además de tréboles y lotus corniculatus.

Criterio para renovar las praderas
Las praderas no tienen fecha de vencimiento; se renuevan cuando baja mucho su nivel de producción. Se valora mucho cuando en las praderas empiezan a aparecer especies nativas como paspalum dilatatum, bromus, stipa setígera. Cuando desaparecen las leguminosas, se las agrega en cobertura.

Criterio para las refertilizaciones
Los mejoramientos de campo se refertilizan año por medio. Las praderas, todos los años. Fundamentalmente se refertiliza con fósforo (no menos de 40 kg de P2O5) en base a fosforita o fertilizantes binarios. Eventualmente se agrega urea en festucas.

La relación costo-beneficio de las pasturas
La pastura productiva permanente es el alimento más económico con que contamos para producir

La productividad del sistema
Para el período comprendido entre abril de 2014 y marzo de 2015, bajo un sistema de recría y engorde parcial de novillos (ciclo incompleto), la productividad por hectárea fue de 287 kg/ha. Hay que aclarar que así como el desempeño económico-financiero en este establecimiento en particular se mide en el periodo julio-junio, la parte física se mide en el periodo abril-marzo.

Categorías para sacar máximo provecho a las pasturas
Las categorías que se usan son las propias de un ciclo completo vacuno: terneros, terneras, novillos 1-2 años, que salen como recriados o gordos de 2 años, vaquillonas que salen preñadas o gordas.

La definición de un módulo de pastoreo
Es un conjunto de potreros que son pastoreados por un lote de vacunos (puede tratarse de una o varias categorías juntas), donde se efectúa un pastoreo lo más rápido posible y se permite un descanso óptimo. Por ejemplo, un módulo de terneros/as en invierno puede tener unas 90 hectáreas divididas en 30-35 potreros, con ocupaciones de 2 días y descansos entre 60-70 días.

Criterios para organizar un módulo de pastoreo
De acuerdo al área de un módulo de pastoreo y el número de potreros que esta tiene, primero se definen dos aspectos “irrenunciables”: tiempo de ocupación y descanso del potrero (en invierno, el máximo de ocupación es de 3 días, el mínimo de descanso es de 60 días). En base a estos criterios surge el número de potreros para cada lote y, por ende, el área total asignada al lote. La carga se fija en unidades ganaderas, de acuerdo a experiencias anteriores.

A continuación, compartimos un ejemplo de planilla donde se registra la entrada y salida del lote y se va ingresando la fecha futura de entrada. Por ejemplo, en el caso del potrero 63,1: salen el 12 de enero, entran el 17 de marzo, descansan 64 días, después entran el 8 de julio, el descanso asciende a 110 días, y se planifica que entren nuevamente el 8 de setiembre, con un descanso que va a rondar los 60 días.

Implementación práctica del sistema
En este aspecto se le da mayor importancia a la simplificación. Se intenta que los módulos queden con los potreros lo más juntos posibles, para evitar demasiados traslados. Lo ideal sería pastorear el potrero que está óptimo, pero eso quita simplicidad. Los puntos de abastecimiento de agua dan para 2, 4 o 5 potreros. En cuanto a los criterios de cambio de parcela: en verano, otoño e invierno el principal criterio de entrada es el número de días de descanso que tiene el potrero. En general la permanencia es fija: 1 día o 2 días. No nos gusta que el campo quede muy “pelado”, preferimos que quede remanente. Si en invierno dejan muy poco hay que tomar medidas, ajustar la carga: agregar algún potrero, sacar animales, dar fardos o suplementos para “estirar” el pasto. En primavera el pastoreo también es corto (1-2 días), los descansos son más breves y el criterio principal para entrar a pastoreo es la disponibilidad.

Manejo del agua de bebida
Algunos potreros tienen cañadas; la mayoría por bebedero. Hay dos fuentes de agua: pozo semisurgente y cantera. Con bombas eléctricas se surten los tanques australianos de estas fuentes. De estos tanques salen redes hidráulicas a los diferentes bebederos. Las tuberías que suministran agua a los bebederos son de polietileno de 1¼ pulgadas. Los bebederos que mejor han resultado son redondos de hormigón. La autonomía de los tanques australianos es de 3-4 días (por si hay roturas).

Suplementación: cuándo y con qué se realiza
Estructuralmente se suplementan los terneros y terneras en su primer invierno. Se trata de asegurar el desarrollo en este período crucial. Para ello se les enseña a comer ración al momento del destete, independientemente del peso vivo. En general es una cuenta que cierra económicamente, dada la eficiencia de conversión que tienen los terneros. Los suplementos a utilizar son los más baratos o los que se consiguen más fácilmente. Por ejemplo, afrechillos de arroz o trigo, sorgo molido seco o húmedo, maíz quebrado, semitín de trigo, cascarilla de soja o mezclas de estos. Los alimentos se analizan en laboratorio y siempre se corrige proteína al 16%. Se puede usar núcleos proteicos para tal fin. El nivel de suplementación es del orden del 1% del peso vivo. En términos generales el suplemento es ofrecido en el potrero en pastoreo. Los comederos (móviles) van acompañando el lote de terneros/as. Se utiliza una tolva racionadora accionada por la toma de fuerza de tractor.

Operativa: cuáles son las claves para manejar un sistema de este tipo
Desde los inicios, por un tema de escala y por falta de personal se buscó un sistema simplificado. Normalmente son tres lotes de pastoreo, que implican el trabajo de un cambio de potrero cada dos días y de un tratamiento sanitario cada dos meses. El cambio de potrero insume menos de una hora por día. La suplementación de terneros, en invierno, naturalmente lleva más tiempo. Este tipo de sistema implica presencia (aunque sea dos horas diarias) y planificación. Otro aspecto clave es el continuo control y mantenimiento de alambrados eléctricos y red hidráulica, para evitar dolores de cabeza.

Qué recursos humanos y materiales se necesitan
Un módulo se maneja bien con un lote de 200-250 cabezas. “Pienso que una persona puede manejar correctamente 5 o 6 módulos”, señala Diego Echenique.

Recursos necesarios
Los movimientos del ganado entre potreros se pueden hacer a pie, en moto, caballo o camioneta. Dependiendo de la escala, para la suplementación invernal se hace importante la mecanización. No se necesitan muchos HP para hacerla.

Utilidad de este modelo para sistemas de escalas del entorno de 200 hectáreas
Sistemas como este podrían ser una buena alternativa para productores pequeños, “y entiendo que en mayores escalas también”. La consigna es, según Echenique, “dividir, dividir y dividir el campo, desterrar el pastoreo continuo, simplificar, minimizar el número de lotes de ganado”. Esto es válido para sistemas 100% pradera y verdeos, o 100% campo natural.