Luego de haber profundizado con Yoel Stolovas en diversos temas sobre el manejo de los toros quisimos conocer cuáles son los problemas más cotidianos a los que se enfrenta, y cómo los resuelve en la práctica del día a día.

Problemas de patas

El problema más frecuente es de patas, a causa de las peleas entre los toros. Pueden darse lesiones muy graves que hay que detectar a tiempo para lograr tratamientos efectivos. Se utilizan antiinflamatorios para reducir la inflamación. Hay que tener en cuenta que algunos pueden afectar la fertilidad del semen, por lo que se los usa solamente si es muy necesario. Si los casos son leves, se utilizan AINE (antiinflamatorios no esteroideos) y con eso es suficiente.

Hematoma de pene

Se da más bien en toros de dos años por la avidez de monta y la inexperiencia. En los primeros días del entore se producen la mayoría de los casos. A veces cuando son chicos son difíciles de ver, por lo que hay que observar con cuidado este tipo de lesiones. Si son detectados rápidamente, con un antiinflamatorio el toro puede recuperarse y volver a trabajar a fin del entore con algún trabajo de baja exigencia.

Cuando el hematoma es importante se proporcionan varias series de antiinflamatorios y duchas de agua. La mayoría se recupera para el año siguiente. Alrededor del 10% de esos toros quedan con adherencia y no sirven más. Eso se detecta en la prueba de monta del año siguiente.

La clave del tratamiento es detectar tempranamente la lesión, e instaurar el tratamiento rápidamente. Cuando se detecta tarde, las posibilidades de recuperación disminuyen mucho. Los antiinflamatorios que se usan son los más potentes que se consiguen (incluyen corticoides), sin importar en ese momento sus efectos sobre el semen (ya que el toro tendrá varios meses para recuperar la calidad seminal). En ese momento la prioridad es bajar rápidamente la inflamación, intentando disminuir las adherencias (que son las que terminan siendo la causa de descarte de toros que han sufrido hematomas).